jueves, 21 de mayo de 2009

Donde yo nací.

Quiero relatarles que tuve la verdadera fortuna de haber nacido en este pequeño lugar en el año de 1946 y desde donde yo recuerdo, mi infancia se desarrolló en un ambiente totalmente de campo fuera del contacto de cualquier actividad y costumbres propias de una ciudad ya que el lugar se encontraba aislado al no contar con carreteras ó ya por lo menos un camino de acceso para medios de transporte propios de una ciudad ó de un lugar en contacto con la ciudad, para salir del lugar había que hacerlo a pie, yo nunca lo hice, pero la gente de edad platicaba que para llegar a la ciudad de Oaxaca se caminaban dos ó tres días a pie.Cuando yo tuve la necesidad de viajar a la ciudad, lo hice a través de un camión de carga, que para entonces llegaban a un pueblo vecino éstas unidades, que transportaban mercancía de todo tipo pues en ese lugar se hacía un mercado todos los días jueves y la gente que tenía la necesidad de viajar a la ciudad lo hacían a través de este transporte, éste viaje era sumamente pesado, peligroso e incomodo por ir sentados sobre bultos, costales ó cajas y viajar por un camino muy accidentado ya que era de terracería, totalmente lodoso en épocas de lluvia y con derrumbes, si las unidades se llegaban a descomponer había que esperar a que lo repararan ó bien continuar a pie.
Sin embargo mi infancia fue feliz porque yo asistía a la escuela, para esto era costumbre levantarse muy temprano tal vez a las seis de la mañana y el tiempo alcanzaba para hacer muchas cosas a mí me gustaba ir antes que nada a darme un baño a un pozo cercano en donde todos los hombres del lugar hacían lo mismo, después de esto tenía que atender unos diez ó quince borregos que eran propiedad de mi abuela quien me responsabilizó de los mismos, los llevaba y los dejaba amarrados en un lugar donde tuvieran pasto que comer y por la tarde regresaba por ellos para encerrarlos en su corral, después de atenderlos por la mañana me regresaba a la casa a tomar mi buen almuerzo y a las ocho de la mañana tocaban una campana para anunciar la entrada a la escuela, y todos los niños asistíamos muy gustosos tal vez porque era el lugar en donde se jugaba, se platicaba y además se disfrutaba de las clase porque tengo la impresión de que los maestros de aquellos tiempos tenían una verdadera vocación de maestros, yo tengo muy presente que lo que sé de Historia, Geografía y no se diga Ortografía lo aprendí en la primaria y en esta escuela.En esta escuela las clases eran en español y toda la gente del pueblo hablaban el dialecto zapoteco en muy pocas familias se hablaba el español, una de ellas era la mía a excepción de mi abuela que no tuvo la oportunidad de asistir a la escuela en su infancia por tanto ella solo hablaba el zapoteco, sin embargo mi madre que tuvo la oportunidad de estudiar la educación primaria en la ciudad de Oaxaca a mí siempre me habló en español, por lo que yo no tuve ninguna dificultad en la escuelas como la tenían la mayoría de los niños que en su primer día de clases no hablaban el español.
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